jueves, 5 de marzo de 2009

LA MAFIA DE LOS KIKOS EN MURCIA

G. Serrano es un joven murciano que ha tenido que recurrir a los tribunales, que le han dado la razón, para demostrar que estaba casado y tuvo un hijo. Ahora puede verlo. Se casó muy joven, pero la familia de su mujer no lo quería. Sus suegros pertenecían al movimiento neocatecumenal conocido como "kikos". Cuando se separó, no constaba ni su matrimonio, ni siquiera la partida de nacimiento de su hijo. Desaparecieron misteriosamente esos documentos. No existía esa parte de su vida. Toda una odisea para demostrar el matrimonio, y que es el padre del hijo que ahora puede ver. Afirma, con nombres y apellidos, que "los kikos querían que mi mujer abortara"

No hay comentarios: